miércoles, 26 de junio de 2013

Por Qué No Deberías Enseñarlo Absolutamente Todo en tus Fotografías

¿Estás Siendo Demasiado Repetitivo?

Las fotografías con patrones repetidos pueden ser muy interesantes pues suelen tener un ritmo visual muy atractivo. Sin embargo, a veces, con enseñar una parte es suficiente. La persona que vea la imagen ya interpretará qué es lo que está viendo y sabrá valorarlo.
En algunas ocasiones, si optamos por intentar hacer entrar todo en la imagen, lo que podemos conseguir es ser demasiado repetitivos y por lo tanto, cansar. A la hora de tomar la fotografía, plantéate si todos aquellos detalles que estás incluyendo en la imagen tienen algo que contar o si, por el contrario, sólo rellenan. En este último caso, quizás es buena idea sacrificarlos dejándolos fuera de encuadre para, así, centrarte en otros detalles que pueden ser más interesantes o, incluso, liberar un poco de espacio para que la imagen final disponga de un poco más de aire. 


Busca Tu Propio Ángulo de Visión

En el fondo, cuando hacemos fotografía, todos intentamos buscar nuestra propia manera de ver las cosas. Si todos usáramos el mismo ángulo de visión en nuestras fotografías, todas las imágenes serían iguales y, por lo tanto, enseñarían lo mismo. Optar por ver el sujeto que tenemos delante de una manera diferente no es otra cosa que decidir qué vamos a potenciar y qué vamos a tratar de esconder. Así que, como ya hemos dicho en otras de las razones del artículo: observa bien el sujeto que vas a fotografiar para descubrir qué es lo que más te interesa enseñar de él y cómo hacerlo. 

Observar Bien Para Saber Qué Dejar Fuera del Encuadre

A veces, el hecho de hacer una fotografía en la que se vea todo lo que queremos enseñar es la opción más fácil y puede ser tentador. El hecho de plantearnos qué podríamos dejar fuera del encuadre puede ser un buen ejercicio fotográfico con el que entrenar un poco nuestro ojo.Nos obligará a observar bien nuestro motivo, a analizar las posibilidades fotográficas que nos ofrece para decidir, en última instancia, qué es lo que quizás sea más atractivo a la hora de hacer una fotografía espectacular.
Además, observar tu sujeto de esta manera puede incluso descubrirte detalles que, de otra manera, te habrían pasado desapercibidos, especialmente si hablamos de monumentos o grandes edificios. La cuestión es que pararte a observar y a pensar cómo podrías conseguir una mejor fotografía hará que termines realizando una imagen más "reflexionada", más trabajada y esto también es aprender fotografía.

Deja Espacio a la Imaginación

La mente humana se aburre con mucha facilidad. Si se encuentra con una imagen demasiado evidente, que no presenta secretos o que es demasiado evidente, es probable que nuestro cerebro no se sienta atraído por ella. Por esto, el hecho de no enseñar todo lo que podrías puede llevarte a hacer fotografías que llamen más la atención porque conseguirás que las personas que vean esas imágenes tengan que invertir un poco de su tiempo para entender qué representa la imagen que tiene delante.
Es como un rompecabezas, como un reto fotográfico que deberás resolver para que la fotografía que tienes delante de los ojos se llene de significado. Puedes plantearlo como un juego con tus "espectadores" o, simplemente, quedarte con los detalles que más te interesen o buscar la fotografía abstracta. Sea como sea, el hecho de dejar parte del sujeto fuera del encuadre puede darte una imagen más atractiva y original.

Consigue Engañar al Espectador

Evidentemente, el hecho de enseñarlo todo o no dependerá completamente de cada imagen y también del momento, del lugar y del sujeto que en ella aparezca. Pero, por norma general, cuando vayas a hacer una foto, párate a pensar cómo quieres que sea. No tengas prisa por tomarla, la tranquilidad suele sentarle bien a la fotografía. Decide bien qué quieres enseñar y que deseas ocultar.
Utiliza las oportunidades que te brinda el sujeto que tienes delante para tu beneficio fotográfico y no te conformes en hacer clic a todo lo que tengas delante: esta clase de decisiones son las que, al final, terminarán forjando tu propio estilo fotográfico. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario